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Intrumentum domesticum IV. La cerámica y la higiene.

¡Buenos días!


Hoy os hablaré del papel de la cerámica en el ámbito de la higiene, donde adquirió gran importancia y un amplio espectro de uso, desde los revestimientos de las piletas de baño -hablaremos del papel de la cerámica en la construcción en próximas entradas-, hasta pequeños recipientes contenedores de productos destinados a la limpieza personal (Bustamante Álvarez, 2011:75). Como en los casos anteriores, materiales como el vidrio o el metal se utilizaban, pero estaban presentes en las esferas más ricas de la sociedad romana.


Es cierto que las termas son el elemento que se nos viene a la mente por asociación cuando hablamos de higiene en el mundo romano, pero a pequeña escala, el elemento por excelencia es el ungüentario. Un ungüentario es un pequeño recipiente cuya función es contener, normalmente, productos relacionados con la higiene (Bustamante Álvarez, 2011:75) -perfumes- (Ceres.mcu.es, n.d.), siendo estos los balsamaria -contenedor de balsamo-, aunque también se pueden encontrar los lacrimaria -contenedor de lagrimas- (Anderson-Stojanović, 1987:105), así como algunos contenedores con fines farmacéutico (Ceres.mcu.es, n.d.).


En el caso de Augusta Emerita, como siempre nuestra referencia, encontramos tres tipos de ungüentario atendiendo al material en el que están fabricados (Bustamante Álvarez, 2011:75):


Vidrio: aparecen con relativa frecuencia en el registro arqueológico y presentan morfologías muy diversas (Bustamante Álvarez, 2011:75).


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Broncíneos: su uso esta vinculado a la élite y presentan representaciones plásticas de gran complejidad (Bustamante Álvarez, 2011:75).


Cerámicos: aparecen en los primeros momentos de la vida de la ciudad, siendo su origen foráneo -se plantea una posible procedencia itálica-. Su continua aparición en época augustea-tiberiana permite hablar de un prácticamente “fósil director” de ese momento, puesto que su uso cae drásticamente a partir del gobierno de Tiberio. Son de color anaranjada en el exterior, mientras que en el interior y en la mitad externa de su cuello presenta un engobe irisada; tipológicamente se distinguen dos variantes, fusiforme -alargadas- y a modo de “redoma” -con cubierta semicircular-, esta última es la más común (Bustamante Álvarez, 2011:75).


Ungüentarios y lucerna en cerámica común, Augusta Emerita (Bustamante Álvarez, 2011:75)


Mayormente han sido localizados en contextos funerarios, pero se sabe que formarían parte del servicio de tocador cotidiano y que su función sería contener perfumes y aceites perfumados. A parte de los ungüentarios se han encontrado también pequeñas cajas -píxides-, sobre todo de metal, que cumplirían el mismo propósito (Bustamante Álvarez, 2011:75).


Desde comienzos del Principado, el uso de los perfumes pasó de ser una corriente imitativa a un símbolo de ostentación, riqueza y poder, un uso que degeneró hasta la exageración: se perfumaban las bebidas, los alimentos, los templos y las calles. Era un producto de primera necesidad con funciones muy diversas:


Se utilizaron como ofrendas votivas y funerarias, cumpliendo así una función suntuaria; también se ponían dentro de los infundibula -estos perfumes tenían una consistencia más oleica y espesa-, proporcionando luz y, al mismo tiempo, olor; en los tepidaria de las termae se ofrecían masajes aderezados con aceites y ungüentos perfumados que tuvieron una amplia aceptación entre la élite (Bustamante Álvarez, 2011:75-6). Así mismo, los unguentaria tuvieron un papel de importancia en la política romana, sobre todo en los actos evergéticos, como ejemplos, aunque no sean locales, encontramos grafitos en Pompeya que anuncian sparsiones -rociados de perfume- con motivo de la inauguración de unas termas, así como en honor a Claudio se anuncia lo mismo para unos juegos gladiatorios -para hacer más agradable la velada- (Bustamante Álvarez, 2011:76).


¿Qué otros elementos se han encontrado de forma minoritaria en AugustaEmerita?


Posibles orinales portátiles que se han localizado en el alfar de la Avenida Lusitania -dos ejemplares-, pueden encontrarse paralelos, aunque con características sensiblemente diferentes, en Pompeya y en los itálicos. Su uso podría afectar a la esfera doméstica, pero también a la artesanal -se recogían orines para el blanqueamiento de textiles, fulllonicae, oficina infectae, etc. (Bustamante Álvarez, 2011:76).


Urinario portátil localizado en Pompeya (Bustamante Álvarez, 2011:76).


A mi me parecen muy curiosos, puesto que morfológicamente son bastante similares a los que podríamos haber encontrado en una casa hace dos o tres generaciones, también en un hospital actual, y porque apenas se suelen mostrar elementos que pertenezcan a esta esfera de la higiene personal.


Por último, se pueden hablar de una polivalencia funcional en barreños y dolia, que podían haber servido como contenedores de agua de uso cotidiano (Bustamante Álvarez, 2011:76).


¡Un saludo!


Bibliografía

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